En la última década, la industria de los videojuegos ha crecido en todo el mundo gracias a las nuevas plataformas de distribución, como las redes sociales y la proliferación de dispositivos móviles tales como tablets y smartphones, permitiendo que los juegos digitales sean masivos y que miles de usuarios participen simultáneamente en línea.
Esta expansión del mercado mundial favoreció a que EEUU, Europa y Asia concentraran en mayor medida los desarrolladores de videojuegos aumentando la actividad en América Latina, sobre todo en Argentina, Brasil y Chile. Consecuencia de ello, fue la creación de la Asociación de Desarrolladores de Videojuegos Argentina (ADVA) en el año 2000 a partir del trabajo de jóvenes argentinos aficionados. Esta Asociación participó activamente el país en uno de los polos más dinámicos de América Latina el área de videojuegos. El sector emplea a jóvenes profesionales encargados de la programación, diseño, ilustración, guion y música.
La industria argentina se profesionalizó y agregó valor a sus servicios, logrando posicionarse como centro de creatividad y capacidad. Esto exige la constante profesionalización de la actividad para desarrollar competencias que enfrenten a los nuevos desafíos.
Recientes estudios, señalan que no solamente los jóvenes buscan insertarse en el ámbito educativo como parte de su proyecto a futuro, sino que en el marco del principio de educación permanente, cada vez son más los adultos en todo el mundo que acuden a las universidades con expectativas de formación que les permitan rever su actual inclusión laboral o encausar facetas vocacionales postergadas.
En tal sentido la UAI ofrece la Tecnicatura Universitaria en Desarrollo de Videojuegos , como carrera corta de 2 años y medio, constituyéndose en una alternativa desde la educación superior en respuesta a una demanda social.